Desde que Fei puede recordar, no ha habido ningún sonido en su aldea, donde el terreno rocoso y las frecuentes avalanchas evitan que los residentes sean autosuficientes. Fei y su pueblo están a merced de una tirolesa que transporta los alimentos hasta los traicioneros acantilados de Beiguo, un lejano reino misterioso.
Cuando los aldeanos comienzan a perder su vista, las entregas de la tirolesa se reducen y muchos pasan hambre. L…
Cuando los aldeanos comienzan a perder su vista, las entregas de la tirolesa se reducen y muchos pasan hambre. L…