Las razones son mías, pero lo último que esperaba era sentirme poseída.
Puedo haber tomado los votos, pero todavía estoy decidida a ser yo.
Ahora sus reglas están tomando el control de mi mundo, pero no soy el tipo de chica que solo obedezca.
Solo hay un problema: podría estar enamorándome de él...
No tengo ni idea de cómo va a ir este matrimonio, pero aferrándome a un pedazo de mí misma sucumbiendo a sus sucios placeres parece que será el viaje de toda una vida.
0 comentarios:
Publicar un comentario
¡Hola! Gracias por tu comentario. No olvides seguirnos en facebook para enterarte de todas las novedades. Esperamos que disfrutes del blog ^.^